La comunicación simbólica es la más utilizada por los adolescentes y jóvenes, son expresiones que desconocen los adultos, especialmente los colores, imágenes, graffitis, lemas, slogans, símbolos y señales. La comunicación entre padres, hijos, familiares y amigos puede ser verbal, no verbal, gestual, corporal y simbólica.
Es muy comun en los jóvenes, el color negro, collares y anillos con dibujos de calaveras, la cruz nazi doblada en las puntas y ahora el arco iris que identifica la comunidad homosexual.
Los tatuajes y los pircis, son otra simbología que expresan en su lenguaje corporal, paradójicamente y de manera contradictoria los jóvenes no quieren entender la simbología de la prevención y un ejemplo de ello es el desconocimiento de las señales de transito, su significado y normatividad.
La responsabilidad de la prevención nos involucra a todos, porque la educación se da en todo momento, en todo lugar, en lecturas, conversatorios y en las relaciones entre el hombre y la naturaleza.
La secretaria de educación debe expedir una norma prohibiendo en los jóvenes el uso de celulares en los colegios, porque desde esos “aparatos” se planean robos, venta de alucinógenos, el credicuerpo, (prostitución, prepago vía celular), el secariato y hasta la venta y alquiler de armas.
La secretaria de gobierno, planeación municipal y departamental, deben sancionar, sellar; los billares, canchas de tejo, cantinas, bares y casas de prostitución frente a los colegios y universidades; para ello la policía nacional cuenta con el censo de casas de lenocinio, pandillas juveniles que rodean infortunadamente las Instituciones Educativas.
Las Secretarias de Gobierno y Secretarias de Educación en colaboración con la policía deben prohibir las ventas frente a los colegios, en las mallas y puertas de las Instituciones, ventas de dulce, mangos biches, forchas, collares, estiques y por debajo la marihuana, bazuco y el famoso perico, tubito pequeño con drogas blanca por dentro que luego la inhalan por la nariz.
A los padres de familia les corresponde el cuidado de sus hijos, protección, comunicación y educación; ya es hora de acabar con el falso testimonio y mito: “como yo trabajo tengo derecho a tomar trago”, es mejor un abrazo a tiempo para los hijos que dedicar su rato libre a jugar billar, tejo y tomarse unas pocholas.
El manual de convivencia en los colegios, debe ser contextualizado, con técnicas de conciliación, mediación y concertación, con un sistema disciplinario alternativo, que acepte el arrepentimiento, propósito de enmienda, reparación de la falta, corrección fraterna, acuerdo entre las partes, acción persuasiva y dialogo, aceptando los compromisos y no siempre utilizando la sanción con la expulsión de los estudiantes.
Finalmente se debe constituir el Comité por la defensa de los Derechos Humanos en cada Colegio, Municipio, Departamento y funcionar de inmediato el comité de prevención integral conformado por el Gobernador, Alcaldesa, Procuraduría, Personería, I.C.B.F., Defensoría, Casa de Justicia, Policía Nacional, Asociación de Padres de Familia, Profesores, Estudiantes, con representantes de las Secretarias de Gobierno y Educación.
